Las lentes esclerales son lentes de contacto rígidas permeables al gas de diámetros entre 14 y 21 mm, básicamente suelen ser más grandes que una lente convencional rígida corneal. Estas lentes están diseñadas para que apoyen en nuestra esclera (la zona blanca del ojo).
Oye, ¿pero si es más grande molestará mucho más? La respuesta es NO, ya que la zona de la esclera es muy poco sensitiva y aguanta mucho más que la zona central o corneal, por lo que su porte a la larga es mucho más llevadera y cómoda en su uso.